28.3.09

Tergal

Salí de la estación de tren y bajé por el paseo como cada mañana. Esquivé algunas bicicletas y espanté algunas palomas. Llegué al semáforo y lo crucé en rojo; la calle estaba casi desierta, los guardias fumaban apoyados en la reja de entrada y oí un golpe sordo, una puerta de coche que se cierra. Ella se cruzó conmigo justo en el primer escalón de la entrada. Me adelantó mirándome sin verme. Llevaba una falda horrible, pasada de moda, subió los peldaños a saltitos, cruzó el hall y giró hacia los ascensores. Era pronto y todo estaba en silencio; yo crucé por el pasillo lentamente y allí estaba ella de nuevo, hierática con su falda fea.

18.3.09

13.3.09

El mismo mar 3


Oleo sobre lino 130x89 cm.

Y qué me dices de Costanza Francavilla! I`ve been w...