28.2.14

Las horas

He sido un funámbulo,
he caminado descalzo,
he sentido
el frío rugoso alambre
dentro del mismo tuétano, allí por donde
se derrama quien soy.
Descubro que no sirvo para las ocasiones
que no soy de saldo
que no salgo para las rebajas
que el alambre está alto y caigo
para levantarme
que prefiero caminar los momentos
paso a paso, así seguiditos sin perder
la línea del horizonte
para llegar y seguir.
Exhausto
oigo que dicen que se acaba el tiempo
y que el tiempo se queda en el cuerpo
 que por eso,  la vida duele.
Durante todo este tiempo
en el que las horas me han abofeteado
he sido un funámbulo, un suicida
del amor que he perdido,
del amor que no tendré. Un equilibrista
ciego que se ha guiado por la marinada
por la sal de la brisa
por las aristas salvajes de las olas.